El Arte de una buena Fellatio

En este bello video podemos observar con todo lujo de detalles los secretos de una Fellatio y de todo su arte...

 

Concentrarse en el sexo

Necesito concentrarme más de lo que lo hago en la cama porque creo que así disfrutaría más. ¿Cómo lo puedo hacer?

El sexo placentero está en algún punto de la unión entre la mente y el cuerpo, donde cada aspecto del individuo interactúa para disfrutar de una experiencia física y emocional maravillosa. Si la mente no está centrada en la experiencia sexual, perdemos la concentración en las señales eróticas que nos llegan a través de nuestros sentidos. Mente y cuerpo deben crear una buena sinergia para que alcemos el máximo placer sexual. Si la mente se distrae y divaga con otras actividades que no estén relacionadas en lo que sucede en la relación sexual, podemos perder la excitación, e incluso llegar a no sentir nada cuando practicamos el sexo. El cerebro es el mayor órgano sexual que poseemos y si no está concentrado en los estímulos eróticos que recibimos o damos a nuestra pareja, es posible que las caricias nos resulten indiferentes sexualmente.
En este sentido, entiendo lo que me cuentas en tu consulta: si cuando practicas sexo ocupas tu mente con otras cosas que no están relacionadas con el placer erótico, pierdes mucha de tu capacidad para la excitación sexual. Mente y cuerpo están totalmente relacionados y tiene que haber una buena simbiosis entre ellos para gozar. La mente es capaz de llevarte a las cotas más altas de placer, pero también puede arruinar tu excitación sexual. El poder de la mente para imaginar, fantasear y visualizar sexualmente es enorme. Podemos excitarnos sin que nadie nos roce, pero también podemos permanecer totalmente fríos ante cualquier caricia sexual si nuestra mente no presta atención a estos estímulos.

Sin prisas

La atención concentrada en el “aquí” y el “ahora” es fundamental para la satisfacción sexual. Abandonarnos al placer y a las sensaciones que nos proporcionan los besos, abrazos y caricias de nuestra pareja es una de las reglas de oro del placer sexual.
Te sugiero dedicar tiempo a explorar el cuerpo de tu amante y estimular sus zonas erógenas, para luego alternar los roles y recibir las caricias de tu pareja. El masaje erótico de “dar y recibir placer” concentrándote en las caricias que das y en las que recibes aumentará tu placer sexual.
Para ir trabajando tu capacidad de concentración sexual te propongo los siguientes juegos sexuales. Tu aprendizaje puede empezar aumentando la concentración en tus cinco sentidos. Para ello vais a realizar ejercicios de “focalización sensorial” en pareja. Por turnos daréis un masaje a vuestra pareja utilizando las manos, boca, lengua, vibrador...o cualquier aparato de masaje que encontréis atractivo y placentero. Empieza pidiendo a tu pareja que tape tus ojos con un pañuelo y te haga un masaje por todo el cuerpo con un buen aceite corporal de cosmética erótica. Empezad el masaje por todo el cuerpo excluyendo los genitales. ¡No os preocupéis, los incluiremos más tarde! Esto hará que vuestro deseo se desboque mucho más. Las caricias que se hacen esperar, son las más deseadas. El placer se cuece a fuego lento, sin prisas.

 

Debes concentrarte en las zonas corporales que él te estimule e intentar transmitirle físicamente las sensaciones que te producen sus caricias. Puede que sientas cosquilleo, calor o frío, en la piel…que los pelos se te ericen…que tus pezones se pongan erectos…etc.  Dile con palabras cada sensación que sientas, cada gemido que sea en voz alta, ya que el hecho de verbalizar tus sensaciones hará que tu mente no se distraiga de lo que estás haciendo y te concentres plenamente en sentir placer.

 

Te voy a poner un ejemplo práctico: me estas poniendo los pezones duros, lame ahí en el cuello que me ha gustado, vuelve a meter la lengua en mi boca eso me excita, bésame ahí al lado otra vez, me has erizado el vello y me ha dado un escalofrío de placer, ohhhh que gusto me das ahí, metete la teta en mi boca, lame  en la ingle que me excita, ahí despacito, suave, párate ahí y chúpame el clítoris, lame el culo cariño, lo estoy disfrutando mucho, hazme lo que quieras, me excitas así etc..
 Podéis utilizar la boca, un hielo, chocolate corporal…, puede lamerte y recorrer con su lengua tu piel. ¡Sed creativos! Cuando en el masaje hayas alcanzado un nivel alto de excitación, pídele que acaricie tus genitales. Los acercamientos indirectos al clítoris causan mucho placer: roces con los dedos, golpecitos inocentes….
Intenta concentrarte en tu respiración para que acompañe a tu placer y cuando él sienta que se vuelve más agitada por la excitación, puede empezar a acariciar tu clítoris con movimientos lentos. Tú debes de guiarle para que te lleve hasta el orgasmo pero sin pensar en él, sino seguir verbalizando lo que sientes y como te va viniendo.
Ohhh, me gusta que me hagas eso, me va a venir muy grande, lo siento crecer, me da mucho placer y no voy a poder aguantarme, sigue asiiiiiiiiiiiii, ohhhh lo siento, que gusto, es grandeeeeeeeeee te quiero amor mío….
 Después harás lo mismo para él.

Es importante que erotices tu mente, trabaja la visualización y confecciona historias sexuales y fantasías. De esta forma te concentrarás en temas eróticos que te excitarán y evitarás distraerte con asuntos que no tengan que ver con la sexualidad. Crea tu propio material erótico para que tu mente se concentre en las historias que más te excitan. ¡Suerte y disfruta mucho!

Todo sobre los Pechos...

Los pechos son una de las partes más atractivas de la mujer, e incluso en muchos hombres un pecho bien cuidado es una gran arma erótica. Además tanto para ellas como para ellos pueden ser una gran fuente de placer sexual, así que trátalos como se merecen: cuídalos, mímalos, asegúrate de que su aspecto es maravilloso y decóralos!

Los pechos y los pezones no sólo son una zona erógena muy sensible y apropiada para muchos juegos, sino que además son una de las zonas más eróticas para excitar a nuestra pareja. Esto es especialmente cierto para ellas, ya que para los hombres los pechos son uno de los grandes símbolos sexuales (da igual si son pequeños o grandes, de pezones enormes o diminutos, les encantan!). Pero el pecho masculino también tiene su atractivo, especialmente si está bien cuidado.
Así que vamos a proceder en dos pasos: primero cuidar el pecho para que esté en su mejor momento, y segundo decorarlo para que atraiga toda la atención posible!

Cuidar el pecho
El pecho es básicamente una zona de grasa y músculo rodeada de una piel sensible (especialmente en los pezones). Así que tendremos que cuidarla como a cualquier otra zona sensible de nuestro cuerpo (por ejemplo la de la cara o los labios):
• Exfoliar: Si quieres una piel suave y firme, que dé gusto acariciar y lamer, entonces tienes que quitarte de encima la piel muerta y algunas imperfecciones. Para ello usa una crema exfoliante normal, pero sin pasarte (puedes irritarte la piel). Puedes repetirlo cada dos semanas a un mes, y ten cuidado con los pezones;

• Hidratar: Para que la piel brille como nunca y recupere su aspecto tirante y terso, una buena sesión de hidratante. La piel recibe mejor la hidratación cuanto más sensible y fina es, por lo que los pezones serán especialmente agradecidos. Si quieres convertirlo en un juego erótico ponle la crema hidratante a tu pareja en las manos y que te la dé él/ella. Ya verás cómo queda muy bien extendida!
• Depilar: Un pecho peludo es sólo una opción si no hay más remedio. En la mayor parte de los casos sólo hay una casi invisible capa de vello (perfectamente aceptable), pero unos molestos pelos negros saliendo del pezón. Y estos pelos son molestos a la hora de andar lamiendo los pezones, así que tienen que irse. Como esta zona es delicada no queremos ni cuchillas ni cera, así que nos quedan unas pinzas y quitarlos uno a uno. Si lo hacemos periódicamente se irán debilitando y será cada vez más fácil. Para ellos: Si tienes entre algo y bastante pelo en el pecho, lo primero es quitar el de la zona de los pezones para facilitar el acceso, y luego ver dónde parar. Donde te sientas cómodo!

Los senos de la mujer se encuentran llenos de terminaciones nerviosas, por lo que los hacen una de las zonas más sensibles al tacto. Si son bien manipulados y estimulados, los pechos pueden dejar a una mujer lista para el mejor de los orgasmos.  Los pezones pueden ser protuberantes o más bien pequeños y escondidos y la areola es la parte que los rodea a los mismos, de color distinto a la piel y que suele poseer un vello muy fino.
No todos los senos son iguales, por lo que no todos responden de la misma manera a los diferentes estímulos, lo que si es claro, es que son muy sensibles, (como para que un hombre tenga idea cuan sensibles son, los podemos comparar con sus testículos.)

"Debido a todas las terminaciones nerviosas, los senos son muy sensibles y si las caricias son muy fuertes o bruscas pueden causar dolor."
No hay que pensar que si los pechos son pequeños no se logrará excitar a la mujer como si los mismos fueran de mayor tamaño. Todos poseen terminales nerviosas y pueden despertar el placer en la mujer sin importar su tamaño.

Porque la estimulación de los pechos está relacionada con el orgasmo?
Poder tocas los senos debidamente, permite facilitar el camino que hay que recorrer para culminar en un coito exitoso, debido a que la libido aumenta a niveles muy altos. Como los senos se encuentran íntimamente conectados con el clítoris, esa es la razón, por lo que una correcta estimulación de los pechos prepara a la mujer para lograr un orgasmo con mayor facilidad.
Prueba a masturbarte y acariciar los pechos al mismo tiempo, o hacer el amor mientras te chupan los pezones. El camino al orgasmo será más rápido y placentero

.
El orgasmo triple: Mientras te masturbas, con un dedo en el ano bien lubricado y que te chupen los pezones. Un orgasmo de lo más completo.
La paja Cubana: Se llama así a la masturbación del pene masculino entre los pechos de la mujer. Es importante lubricar bien los pechos y el pene con lubricante a base de agua para que la experiencia sea placentera para ambos. Mientras deslizas el pene entre los pechos aprovechas para acariciar los pezones y excitarte tú también.

El Ritual en el Sexo

Muchas veces olvidamos que el sexo no es simplemente un acto físico y nos olvidamos de convertirlo en todo un ritual que es lo que verdaderamente nos proporciona excitación y placer.

Me despierto por la mañana con ganas de hacerle una felación a mi pareja y verle disfrutar.

Ejemplo 1:
Me dirijo directamente a su pene y empiezo a besarlo y chuparlo. El se excita enseguida y tiene una buena erección. Yo intensifico la mamada y quiero hacerle llegar al orgasmo y que este sea intenso. Va pasando el rato y a él le cuesta correrse y a mi se me empiezan a cansar las manos y la boca. Puede incluso que llegue a irritar su pene y al final no pueda acabar. Si después de un buen rato consigue correrse, yo no lo habré disfrutado plenamente pensando en que el se corra, y el no lo habrá disfrutado tampoco del todo, intentando correrse.

Ejemplo 2:
Me dirijo a su pene dormido y empiezo a besarlo y a darle alguna lamida. El se excita enseguida y consigue una buena erección. Empiezo a besuquear sus testículos suavemente, sus ingles, los muslos, y de vez en cuando paso la lengua por el frenillo y el glande. El se pone como una moto. Ahora abandono sus genitales y dirijo mis besos hacia su ombligo hasta llegar a las tetillas donde me entretengo hasta excitar sus pezones entre mis labios. Continuo hasta el cuello, detrás de las orejas y cuan do llego a su boca me entretengo en sus labios, los mojo, los lamo, los chupo. Le meto la lengua en la boca y me dedico a besarlo profundamente, que su lengua se coma la mía. Su erección es espectacular. Vuelvo a bajar a su polla y le doy una buena chupada y me entretengo un rato lamiéndola. Lamo sus ingles ,el perineo, su culo, vuelvo al pene, me lo trago. Y así relajadamente habré conseguido excitar mucho más a mi pareja que con el ejemplo 1. Intensifico entonces mis lamidas en el frenillo mientras mis manos acarician sus huevos, su culo y no tarda en correrse para mi disfrute y el suyo.

Ahora si hemos disfrutado de verdad y la corrida ha valido la pena para ambos.

A las mujeres les gusta el cine Porno...

Un estudio realizado por la Universidad de Northwestern, examinó los efectos de la pornografía en la excitación genital y concluyó que las mujeres que miran películas eróticas suelen tener menos prejuicios y una vida sexual más completa.

Hasta hace una década la industria del cine pornográfico era exclusiva del género masculino, pero de un par de año a la fecha, las mujeres se han convertido en parte de este mercado.

Celia Laniado, reconocida psicóloga y sexóloga de la Universidad de Buenos Aires, indicó que los hombres coinciden que ver porno es una actividad que debe vivirse en pareja, “si bien algunos hombres lo siguen haciendo a solas, un gran porcentaje ahora lo comparte”.

“Un tanto más audaces, modernas y con la cabeza abierta, hoy se sabe a ciencia cierta que lo que antes se vendía como mito ahora es descartado por colegas y sociólogos, como así también estudios de distintas universidades”, agregó Laniado sobre las mujeres como flanco del cine porno.

Finalmente, la sexóloga dijo que lo que a las mujeres les excita verdaderamente son los actos sexuales en sí, “no los actores, ni las locaciones, a diferencia de lo que los excita a los hombres. Por eso las películas eróticas pueden ayudar a las parejas a jugar y a aprender cosas que de otra manera son muy difíciles de explicar en la práctica”.

Juegos de Pareja: Peluquería Genital

Este es un recurso para la pareja, que debe entenderse de forma totalmente lúdica como de un juego divertido y sensual.

Si no te has depilado nunca los genitales, ni tienes un interés excesivo en ello, o simplemente porque no te gustan los genitales completamente depilados, esta es una buena manera de iniciarse divirtiéndose al mismo tiempo.

El sitio ideal para esta práctica es la bañera
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 Concierta una cita con tu pareja y pon día y hora al acontecimiento. No le digas de qué se trata. Búscate unas buenas tijeras que corten sin dificultad, un peine o cepillo, un champú suave etc…  y pídele a tu pareja que se desnude y venga al baño. Pon un poco de agua caliente en el fondo de la bañera si es invierno, y fría si hace calor, y dile que se siente en el borde con los pies dentro del agua. Explícale que hoy habrá sesión de peluquería.

Con sumo cuidado empieza a recortarle los pelos del pubis como si de una cabeza se tratara, dejándolos más cortitos y bien arregladitos pero sin pasarse.. Haz lo mismo con los testículos (con sumo cuidado), el perineo y todos los alrededores.

El pene, que seguro estará de lo más tieso, se verá más grande una vez acabada la faena. Cuando lo tengas ya bien peinadito y a tu gusto, le haces un buen lavado de la zona con champú como si se tratara de una peluquería profesional y luego bien aclarado con agua calentita.

La sorpresa llegará al final cuando tú te quites tus braguitas y le muestres tu coño bien recortadito y peinado.
 (Debes hacerlo uno o dos días antes y usa cera o maquinilla para las líneas de biquini y el perineo y ano).

El estará encantado con tu peinado y con el suyo y seguro que la noche acaba en sexo caliente para los dos.

La técnica de la Paja Lenta

Esta técnica es un buen regalo para tu pareja que le dará un largo rato de placer intenso y que tú podrás disfrutar en todo su esplendor. Es ideal para después de tener tú, un orgasmo con tu vibrador o masturbándote o para aquellos días que no puedes o no te apetece recibir sexo pero en cambio estás caliente y quieres dar placer a tu pareja.

Necesitas mucho lubricante y de 15 a 30 minutos para dedicárselos a darle placer.

El secreto está en la lentitud de los movimientos sobre su pene, testículos, perineo y ano. Usa las dos manos para acariciarlos pero siempre con movimientos largos y lentos. Empieza por la base del pene subiendo y bajando la mano. Acaricia sus testículos lentamente y con mucho lubricante.

Desliza tus dedos hacia su perineo para poco a poco acercarte a su ano e ir introduciendo despacio un dedo en su interior mientras la otra mano acaricia el pene.

Luego acaricia el glande lubricado lentamente haciendo círculos sobre el agujerito.

Cuando le tengas atormentado de placer y te pida a gritos que quiere correrse, aprieta un poco más una mano sobre el frenillo y el glande y siempre con movimientos lentos hazle una paja con un ritmo siempre igual pero lento. Con la otra mano puedes acariciar sus testículos,  su perineo,  e introducir un dedo en el ano.

Cuando se corra no te pierdas el espectáculo pues te sorprenderá la potencia de la eyaculación y el placer que le habrás hecho sentir. Todo un regalo para él y una satisfacción para ti de habérselo proporcionado. 

Sexo y Menstruación

La menstruación femenina supone en la gran mayoría de los casos un período de abstinencia sexual en la pareja que muchas veces provoca tensiones innecesarias. La menstruación suele durar entre 4 y 7 días y si a esto le añadimos que la última vez que la pareja practicó sexo fue dos o tres días antes de la misma y puede que una vez concluida, pasen otros dos o tres días, nos encontramos con un período sin sexo de unos diez días, o lo que es lo mismo una tercera parte del mes.¿ No crees que sea demasiada renuncia para tan poca cosa?.

El hombre suele compensar este período mediante la masturbación en solitario

y la mujer suele conformarse con la abstinencia. Pero no debemos ser conformistas y buscar soluciones que nos satisfagan plenamente. ¿No crees que es mucho mejor compartir experiencias durante esos días?

-.Una primera medida será la de preparar una sesión de sexo justo el día antes a la venida de la regla y con eso evitaremos un alargamiento excesivo de la inactividad sexual.

Si exceptuamos los dos o tres primeros días de la menstruación, el resto podemos practicar sexo normalmente o bien adaptar las prácticas a la situación. Todo, antes que la abstinencia.

 La mujer, suele aumentar su deseo sexual en estos momentos y no es cuestión de aguarle la fiesta. Además, se ha demostrado que el orgasmo, disminuye la duración y el dolor menstrual.

-.Podemos recurrir a la masturbación mutua cuando estamos tumbados en el sofá y sin necesidad de quitarse la ropa

. Lo mismo puede pasar en la cama bajo los pijamas e incluso podemos hacer el amor sin quitarnos los mismos con el simple frotamiento de los genitales. Es muy placentero y supone una novedad interesante.

-.Recrearse en los besos es una opción muy interesante. Descubrir la sensibilidad en nuestras lenguas y bocas y chuparse y besarse con dedicación.

-.La mujer, puede practicar sexo oral a su pareja mientras este la masturba por debajo del slip o braguita bien en el sofá o en la cama.

-.Otra opción interesante, es la de practicar sexo bajo la ducha o en la bañera.

 

Podemos masturbarnos para que nos disfrute nuestra pareja o bien podemos masturbarnos mutuamente. La mujer puede practicar sexo oral a su compañero mientras este le acaricia los pechos y su clítoris hasta llegar al orgasmo los dos juntos dentro del agua..

También se puede practicar la penetración con la mujer sentada sobre el hombre dentro del agua. Es una forma divertida y diferente de gozar.

 

Este, puede consistir en una masturbación mutua o bien sexo con penetración en las posturas de pie, lo que hará que se convierta en una ocasión muy especial y placentera. Es importante untarse de lubricante antes de entrar en el agua para evitar la sequedad en el roce que produce el agua. Úntate delante de tu pareja para que pueda disfrutar del espectáculo. El agua de la ducha hará el resto, y ni rastro de la regla.

 Lo más importante a tener en cuenta es que no podemos permitirnos el lujo de desperdiciar 10 días cada mes, por una cuestión fisiológica que no tiene mayor inconveniente que dos o tres días de regla intensa. Al año habremos desperdiciado 120 días- Una barbaridad!!!

Disfruta de tu cuerpo todos los días de tu vida y serás feliz.

Mis Fotos Favoritas: Fellatios

Sexo Anal: Primeros Pasos (IV)

4.- Ya has probado las bondades del sexo anal en diferentes modalidades y ya estás preparada para el paso definitivo. La penetración anal con tu pareja.

Todo debe ser muy relajado y sin prisas. Hay que calentarse bien con juegos previos y aplicando alguna de las prácticas anteriormente explicadas en la zona anal para ir relajando la musculatura de la zona. Una buena postura para empezar es acostada de lado con tu marido por detrás. Debes tener el culo bien lubricado y el pene de tu marido también. Os abrazáis con pasión, y mientras te acaricias el clítoris con la mano, acercas el pene a tu ano y con movimientos suaves lo vas introduciendo despacio buscando las sensaciones más placenteras. Conforme vayas estando más excitada, el ano se irá relajando y te apetecerá introducirla un poco más. Controla tú la profundidad de penetración para sentirte cómoda y disfruta de la situación.

 
No debes preocuparte si las primeras veces no hacéis una penetración completa ya que lo importante es sentirse a gusto y disfrutar de un placer nuevo y muy intenso. En siguientes ocasiones es probable que desees ir más allá para darte un placer aún mayor.
Recordad de no introducir el pene ni en la boca ni en la vagina después de una sesión anal.
 Si no habéis llegado al orgasmo, acabad con una masturbación mutua.

Las mejores posturas para el sexo anal son el perrito, o el misionero con las piernas levantadas y un cojín debajo el culo, la cabalgadura inversa así como la postura lateral anteriormente citada.

 
Ahora ya has probado una de las formas más excitantes y placenteras que te ofrece el sexo en pareja y probablemente ya no quieras perdértela nunca más. Con el tiempo y la práctica irás descubriendo nuevas sensaciones al igual que tu pareja.
Pero eso lo hablaremos más adelante con un especial de sexo anal avanzado. Ahora es momento de disfrutar de las nuevas y recién descubiertas experiencias anales.